Aprovechar los datos de la tecnología BIM acelera la construcción, mejora la seguridad y optimiza los recursos para mejorar los resultados generales.
Utilizar datos de modelado de información de edificios desde el proceso de diseño y construcción a lo largo de la vida útil de una estructura puede aportar varias ventajas. BIM permite un desarrollo rápido y seguro, un uso más eficiente de los materiales, rentabilidad en las operaciones, mantenimiento y desmantelamiento, ¡todo ello respetando el medio ambiente!
Construir de forma sostenible significa crear entornos seguros, eficientes y responsables que satisfagan las necesidades contemporáneas sin sacrificar el futuro. Es un enfoque holístico de la construcción que tiene en cuenta la viabilidad económica, el respeto al medio ambiente y las preocupaciones sociales, haciendo hincapié en la excelencia arquitectónica, la innovación y la escalabilidad.
La construcción sostenible es un enfoque integral del diseño y la gestión de edificios que va más allá de los aspectos básicos de la eficiencia energética. Implica tener en cuenta todos los aspectos de la construcción, incluido el rendimiento de los materiales, la aplicación de la tecnología, la utilización de los recursos y las estrategias de mantenimiento continuo a lo largo de la vida útil de una estructura.
De este modo, nos permite crear estructuras no sólo para hoy, sino también teniendo en cuenta su impacto en las generaciones futuras.
Con BIM, se posibilita una colaboración sin precedentes entre los expertos del proyecto, no sólo para mejorar el rendimiento de los nuevos activos, sino también para dar forma a cómo se diseñan y gestionan.
Esta coordinación aumenta la sostenibilidad mediante una mayor transparencia durante el diseño, una mayor eficiencia en los proyectos de construcción, un pedido más preciso de materiales/equipos que elimina posibles desperdicios: Todos ellos pasos positivos hacia un futuro más sólido.
BIM demuestra su valor proporcionando un nivel de transparencia sin precedentes a contratistas, ingenieros y proveedores durante todo el proceso de construcción, de principio a fin.
Esto permite a las partes implicadas en un proyecto aprovechar su base de conocimientos para encontrar soluciones de diseño más sostenibles antes de invertir tiempo y dinero en el funcionamiento del edificio. El uso a largo plazo de dicha estructura puede entonces optimizarse mejor con herramientas BIM que promuevan la sostenibilidad incluso después de su finalización.