Se prevé que América Latina experimente un aumento de los fenómenos meteorológicos extremos que tienen el potencial de causar grandes daños y destrucción. Esto incluye un aumento de la temperatura, posibles inundaciones; tormentas desencadenadas por la temporada de huracanes y fuertes lluvias.
La ONU calcula que en 2050 el 68% de la población mundial vivirá en zonas urbanas. Este aumento de la densidad implica una mayor demanda de recursos básicos para garantizar la calidad de vida y la seguridad.
La mejor salida sería crear nuevas políticas o mejorar las antiguas para poder abordar adecuadamente lo que ocurre dentro del país. Por esta razón, Amanco Wavin presenta 3 tecnologías para construir ciudades sustentables:
La tecnología AquaCell, que permite una gestión sostenible del agua mediante su retención. Esta solución innovadora reduce la carga de los picos de lluvia en nuestras redes de alcantarillado y sistemas de drenaje natural para evitar las inundaciones en las comunidades de toda América Latina.
¿Por qué no tener lo mejor de ambos mundos con este sistema? Puedes utilizarlo de forma independiente o combinarlo con otros productos como el Quickstream, también de Amanco Wavin.
El sistema QuickStream de Amanco Wavin es un nuevo y revolucionario producto que puede capturar todas tus necesidades de agua pluviales en un diseño limpio. Este sistema no sólo te ahorrará tiempo y dinero, nunca tendrás un problema de desbordamiento o inundaciones en la edificación.
Además, el rendimiento hidráulico de las tuberías es mejorado ya que en la tubería solo recorre agua, sin la elaboración de pendientes y es un sistema autolimpiante por el alto flujo del líquido.
Las geomallas coextruidas son una forma estupenda de reforzar la estructura del pavimento y proporcionar confinamiento. Formadas por elementos rígidos y flexibles, estas fibras sintéticas mantienen todo en su sitio.
Sin embargo, para prevenir el riesgo en una ciudad, las empresas y los gobiernos deben tomar medidas esenciales. Entre ellas se encuentran:
Las ciudades que se proyectan hacia una transformación basada en la sostenibilidad necesitarán nuevas infraestructuras y funcionamiento para ser resistentes.
Estos cambios no pueden producirse de la noche a la mañana, pero son importantes para garantizar el éxito continuado de la población de nuestro planeta en las generaciones futuras.