A medida que el planeta sigue calentándose y los fenómenos meteorológicos extremos, como las olas de calor, se convierten en habituales, mantenerse cómodo en un ambiente interior resulta cada vez más difícil y caro.
Temperaturas que antes eran relativamente suaves se están volviendo insoportables y el aumento del consumo de energía tiene un coste, además de contribuir a la crisis climática en la que nos encontramos.
De allí radica la necesidad de adoptar soluciones energéticamente eficientes para la construcción de edificios en pro de reducir el impacto medioambiental de una estructura.
La más ambiciosa de estas medidas es el concepto de "casas pasivas", que utilizan la arquitectura y el diseño del propio edificio para mantener una temperatura confortable durante todo el año, disminuyendo así el consumo de energía en un 90% aproximadamente.
A medida que se construyan más edificios teniendo en cuenta la conciencia medioambiental, es seguro que esto tendrá un impacto positivo duradero en la sostenibilidad global.
Berthold Kaufmann, científico principal del Passivhaus Institut, subraya el papel fundamental que la arquitectura puede y debe desempeñar en la reducción del consumo de energía.
Al aprovechar los conocimientos técnicos de los componentes de la arquitectura, el ahorro de energía ya no depende únicamente de los hábitos individuales de los usuarios, sino que también puede fomentarse mediante la mejora de las infraestructuras.
Mediante este compromiso con las iniciativas de ahorro energético, la institución alemana ha establecido una norma mundial de diseño arquitectónico que fomenta la sostenibilidad al tiempo que promueve la eficiencia.
La elección de materiales adecuados como el vidrio, que absorbe el calor solar durante el día y lo libera durante la noche, desempeña un papel importante en este equilibrio.
El diseño adecuado también juega un papel significativo para la conservación del calor durante el invierno y la refrigeración durante el verano.
Por ejemplo, ventanas grandes instaladas en varias ubicaciones permiten que entre luz natural durante todo el día.
Las paredes exteriores deben ser resistentes al fuego para prevenir personas, animales o cosas contra incendios accidentales.
Los materiales capaces de imitar las propiedades térmicas naturales cuando buscan construir con arquitectura pasiva son controladores solares activos.
Estos incluyen persianas motorizadas, lonas protectoras contra trazos UV y revestimientos fotocatalíticos.
Estos materiales se caracterizan por maximizar la radiación solar incidente sobre las superficies interiores.
Otros materiales útiles incluyen paneles solares que producen electricidad a partir del sol directo y recirculación natural del aire caliente o frío dentro del edificio sin ninguna ayuda mecánica externa.
En resumen, la búsqueda de arquitectura pasiva busca obtener un equilibrio energético entre calor y frío utilizando métodos innovadores que no emplean equipamiento mecánico tradicional para climatizar espacios interiores con luz solar natural disponible alrededor del reloj. ¡Conoce hoy el mundo Amanco Wavin!